En una clase
me fue tan mal que mis ganas de tocar/cantar me enseñaron a resistir.
Un día, me
criticaron de tal forma que me dolió y entonces aprendí a posar mi autoestima
en cosas más fuertes.
No quedé en
una audición y entendí que el único lugar donde puedes preparar algo así es
precisamente allí: haciendo audiciones.
Como en la
música, a veces es necesario hacer Da capo y empezar de cero.
Más
importante que el título es el proceso.
El mejor
músico no es el que siempre le va bien sino el que vuelve a la batalla una vez
que ha domado su miedo
Adaptado para
Músicos de "El camino del Guerrero"
Eduardo
Carlos Juárez
Psicoterapeuta
Gestalt
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