EL
ONCEAVO #MANDAMIENTO
Fui monaguillo desde los 12 hasta los 17 años, aprendí muchas cosas sobre los
ritos, tiempos litúrgicos, pasajes muy específicos de la #Biblia y sobre todo cómo se manejan las
cosas desde dentro.
Cuando el Padre Arturo Gasperín Cessa estuvo a cargo de la #parroquiaEmperatriz de América me dio su apoyo en
todos los sentidos. Bromeaba mucho conmigo y me quería mucho. Como no quería
estar en mi casa buscaba cualquier pretexto, el domingo #acolitaba en dos misas y los bautizos. En
ellos me tocó ver que entre tanto monaguillo a veces hacíamos tumulto a lo que
al final de una misa el padre nos dijo a todos/as (había monaguillas también):
"recuerden que hay un onceavo mandamiento que no aparece en la Biblia que
se llama "no estorbarás"
En una mañana libre de la #giraorfixcaribe2018 fui con mis amigos a rentar
un #kayak, mis amigos y esposa escogieron el suyo, yo
creyéndome #Rambo le pregunté al guía a qué distancia estaba el canal
de los piratas, me dijo que a un kilómetro. Mi razonamiento fue: "si hago
2 kilómetros por clase de natación esto no es nada"
Zarpamos rumbo al lugar y el guía italiano que se llama Pietro me dijo
"quédate nadando junto a mi". Los primeros metros pude llevarle el #ritmoporque iba mostrando a mis compañeros cómo hacer los
movimientos de kayak para avanzar mejor y no lastimarse, pero una vez que tomó
velocidad me fue imposible alcanzarlo. Nadé lo más rápido que pude y Pietro me
dijo que no había más remedio que me sujetara de la cola del kayak y que
hiciera #crowl alcanzando la brazada.
De regreso la historia fue igual pero empecé a patalear más duro según yo para
ayudar con mi peso a lo que Pietro me dijo: "mejor quédate inmóvil porque
haces más #resistencia" Hasta ese
momento me di cuenta que realmente estaba estorbando en mi afán de probar que
podía solo. A veces mucho #ayuda el que no estorba. Me dejé llevar sin moverme y
empecé a pensar cuántas veces hago lo mismo en mi todos los ámbitos de mi vida.
Esa media hora en la que fui admirando toda la laguna de Bacalar por debajo me
sirvió para reflexionar este onceavo mandamiento y como un "ayudador"
puede estar siendo realmente un "#controlador" sin darse cuenta.
A la llegada al muelle le ofrecí disculpas a Pietro contándole lo que
reflexioné a lo que me dijo con mucha sencillez: "todos en algún punto de
la vida hacemos eso" Le pagué como si hubiera ocupado un kayak.
La #vida es un mar de darse cuenta. El maestro no es una
persona necesariamente, es una situación que puedas ver siempre y cuando te des
la oportunidad de verla.
Después nos fuimos a tomar una cerveza y riéndonos todos Pietro comentó
"la verdad es que si hay que tener condición para dejarse llevar por tanto
tiempo bajo el agua"
Gracias amigos por la experiencia y tolerarme
No hay comentarios:
Publicar un comentario