
El proceso #terapéutico es una danza que tiene implicación en los que están presentes en ella. Desde el enfoque Gestalt todo lo que pasa dentro del consultorio tiene un impacto en ambos siendo la responsabilidad del #terapeuta ir unos pasos más adelante en la compresión de sí mismo/a.
Sigmund #Freud descubrió que trabajando con los consultantes llegaba un momento en que éstos empezaban a transferir roles de su vida en él: papá, mamá, parejas, etc. A este proceso lo llamó #transferencia y fue una de las primeras cosas que ocupó para intervenir con los consultantes.
La #psicoterapia fue evolucionando y el concepto de transferencia también. En la actualidad es muy normal que se dé una transferencia de consultante a terapeuta y también de manera opuesta lo que se conoce como #contratransferencia que es cuando es el/la terapeuta la que empieza a posar cosas sobre el consultante. Por ello es vital que el/la terapeuta siga en terapia y #supervisión constante ya que cual humano/a puede tener asuntos inconclusos, nuevos o simplemente etapas de su vida que no le permitan poder ver esa contratranferencia y seguir trabajando con el paciente.
Mi primera terapeuta fue Araceli González Saavedra a quien consulté por ansiedad y depresión, como es normal fueron saliendo otros temas entre ellos mi pésima forma de relacionarme con mi pareja. Pasó tiempo hasta que empecé a sentir una #atracción hacia ella y me causó conflicto, primero porque no sabía por qué me pasaba y segundo me daba pena contarlo. Es normal que cuando una persona te escucha sin #juzgar y además te da todo el apoyo sientas una conexión emocional. Cada paciente reacciona distinto. Yo empecé soñando con ella e imaginándome en una relación. En la realidad sabía que no era factible pues ella estaba #casada y yo tenía como diez años menos además de que era mi terapeuta. Ahora me doy cuenta de que simplemente estaba transfiriendo un deseo de ser comprendido, escuchado y no juzgado; o tal vez la habilidad de pedirlo o de creérmelo merecedor. Conforme mi relación de pareja fue mejorando la atracción sobre mi terapeuta fue bajando a tal grado que no consideré necesario siquiera #comentarlo.
Cuando estudié para terapeuta me di cuenta de que el fenómeno de la transferencia es completamente normal y hasta necesario. El/la paciente siempre llega a #proyectar algo sobre la persona que tiene enfrente: un #papá golpeador, una #mamá abusadora, una posible pareja, un #amor imposible, etc. El/la terapeuta debe tener muy en claro que este es un tema del paciente y por lo tanto poder trabajar con ello de la forma más #adecuada. He tenido infinidad de transferencias con mis terapeutas y todos me las han devuelto con mucho cariño. He visto a mi papá, a mi mamá, a mi hermana, hermanos, etc.
Como terapeuta recibo las transferencias de mis pacientes como un #regalo, cual quiera que sea es oro molido para trabajar porque me permite saber con más #precisión qué es lo que el/la paciente necesita. Cuando esa transferencia me hace #ruido salgo corriendo a supervisión.
Enamorarse del/a terapeuta es algo común y hasta #entendible. ¿Cómo no sentir afecto por una persona que te escucha, comprende y no te juzga? Por eso es importante que el/la terapeuta comprenda bien su #rol porque aunque la persona que acompaña pueda ser sensible, cariñoso/a, comprensible no dejará de confrontarte porque precisamente para eso le estás pagando. Es una persona a tu #servicio.
Sirvan mis propias transferencias para que conozcas un poco más del mundo de la psicoterapia del lado del paciente y del lado del terapeuta. Me gusta compartirme.
Con Cariño, Edu.