Un músico se graduó de la escuela. Se enteraron sus colegas de su triunfo, y
lo/la felicitaban. Días después el/la intérprete sintió la necesidad de ir
a #clase. Un colega intervino diciendo: «¡No!
intenta primero resolver tus #dudas por tus medios.» Otros
replicaron: «Pero para eso está el #maestro/a.»
Entonces muchos preguntaban si realmente podían
continuar sin maestro/a después
de la #carrera. El músico explicó: «Tengo dudas para
continuar mi formación pero puedo llegar con propuestas más que con preguntas.»
Todos se quedaron extrañados. Inmediatamente empezó a# justificar sus fraseos,
a buscar digitaciones y poco a poco empezó a considerar ya no ir corriendo a
clase.Entonces muchos preguntaban si realmente podían
Los otros músicos quedaron asombrados, y corrió la noticia por varios cubículos del #conservatorio. Algunos reflexionaban diciendo: «¿Qué va a ser este colega?» Porque ya entendió que el maestro es él/ella misma y su antiguo maestro será un acompañante con más #experiencia. El recién graduado iba creciendo, y su carácter se afianzaba; buscó cómo resolver sus dudas, aprendió que la música se estudia desde la técnica, el #análisis y la conexión emocional. Buscó bibliografía. Finalmente se hizo su propio/a maestro/a
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