Aún en el caso de que tengas la seguridad de tener el comentario correcto,
reconozca que la forma de interpretar de su colega es exactamente igual de
válida. No tiene que mostrarse necesariamente de acuerdo con su ella, pero sí
que ha de aceptar que pueden existir dos percepciones válidas y diferentes que
merecen ser igualmente tenidas en cuenta. La consideración positiva de la
perspectiva del otro siempre permite aprender algo valioso
En toda
interpretación existe más de una versión de la realidad y todas ellas son
"correctas". Para poder buscar la solución a un pasaje uno ha de
reconocer que existen técnicas o formas de frasear que uno no comparte y
mostrarse al mismo tiempo respetuoso con ellas
Lo que
tendemos a hacer cuando damos retroalimentación es ver a la otra persona como
alguien muy distinto de nosotros mismos. Pensamos que nosotros estamos llenos
de rasgos y cualidades positivas, mientras que nuestro colega se halla repleto
de elementos negativos
Tendemos a
mostrarnos menos exigentes con nuestros propios errores y no con los de los
demás. Está claro que esta forma de ver la música constituye un obstáculo para
todo aquel que pretenda dar una retroalimentación positiva.
Cada vez que alcance a ver una cualidad negativa en su colega, trate de descubrirla en su propia persona
Cada vez que alcance a ver una cualidad negativa en su colega, trate de descubrirla en su propia persona
No existen
las críticas constructivas. A menos de que se soliciten expresamente, las
críticas hacen que los artistas nos pongamos a la defensiva, y esto a su vez
nos impide hallar la forma de resolver lo que nos quieren decir. Por muy
elevado que sea el grado de confianza existente en una relación, la verdad es
que nadie es capaz de escuchar una serie de ataques personales sin adoptar una
postura defensiva
Si te hallas
en posesión de dar retroalimentación después de un recital, debes esforzarse en
mostrarse tolerante, sensible a los puntos vulnerables de tu colega y dispuesto
a no hacer críticas ni juicios de valor. Esto contribuirá a reducir la tensión.
Cuando se encuentra uno en la posición de la persona que ha de escuchar al
otro, lo importante es saber resistir el imperioso deseo de discutir. Será más
fácil mantener la boca cerrada si recordamos que, al llegar nuestro turno,
disfrutaremos del mismo respeto
No pierdas tu
tiempo tratando de ser como tu ídolo musical. Un tronco que flota años en un
río no se convierte en cocodrilo
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