sábado, 4 de abril de 2020

UN DÍA FELIZ MIÉRCOLES 13 DE JUNIO 2018


Despierto, dormí poco más de 8 horas. Lo primero que veo es a una mujer bellísima a mi lado, ni una gota me maquillaje 100% simpatía. Sigue durmiendo. Empiezo a escribir. En la mañana tengo las ideas frescas. Siento en lo que estoy posado. Tengo la fortuna de descansar en un colchón, de tener cuatro paredes y un techo que me protege de la lluvia matutina.
Pongo los pies en el piso y me doy cuenta de que tengo un calzado y una ropa que vestir. Bajo y hay un animal de 4 patas que mueve la cola constantemente, tiene hambre. Tomo un vaso con agua y mi medicina diaria. Qué privilegiado soy de tener los elementos para tener mi cuerpo lo mejor posible. Despierta Anita, me habla con un acento sexy “cómo amaneció mi amor” empezamos a platicar. Desayunamos, preparo un licuado de mango con avena, que rico es cocinar en pareja. Ella se pone a estudiar yo me pongo a ver pendientes. Nos alistamos, esta semana estamos trabajando en la misma orquesta. Llegamos, tocamos una obra que a ambos nos gusta, en el intermedio vamos con nuestra amiga a comer algo, pedimos una torta de milanesa de soya y la compartimos. Regresamos al ensayo. Salimos a sacar unas copias, yo la dejo y me voy caminando a una reunión para ultimar detalles de la gira y pedir más apoyo. Pasada una hora camino hacia la casa, tengo una tarde llena de pacientes de 3 a 8 de la noche. Son músicos que acompaño y que me regalan toda su autenticidad, humildad y confianza. Me siento honrado de acompañarlos/as y de caminar con ellos en un proceso que yo caminé y sigo caminando. Terminan las terapias. Hago los resúmenes de sesión. Voy con mi esposa, preparamos la cena, me echo una copita de vino cabernet sauvignon, ella se pone a estudiar y yo a revisar mis scores y contestar mensajes de futuros pacientes en internet. Nos vamos a la cama, platicamos cómo nos fue en el día, nos abrazamos, nos deseamos buenas noches, nos damos “piquito” y da capo.
Si alguien hiciera una biografía de mi algún día por favor que conste en el acta que estos son los años más felices de mi vida.

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